Mientras nuestro gobierno lanza la campaña por el respeto, para contrarrestar la rampante ordinariez con que nos tratamos en el espacio público, el gobierno británico urge a sus ciudadanos a vivir mejor.
Change4life es el encabezado, e insta a los súbditos de Elizabeth Regina a “comer bien, moverse más, vivir más”. ¡Cómo estarán de flojos! Según un estudio reciente de la ONG Nuffield Health, 1 de cada 6 británicos prefiere seguir viendo un programa televisivo que no le gusta, antes que pararse y cambiarlo en caso de que el control remoto no esté a mano, o se haya echado a perder.
... 6 de cada 10 prefieren tomar el ascensor a subir dos pisos.
...la mitad de los que tienen perro no lo sacan nunca a pasear
... Dos tercios llegan demasiado cansados para jugar con sus hijos.
... El 73% de las parejas dice no tener la energía suficiente para… tener sexo.
Comida preparada, control remoto, compra por Internet, sexo virtual… El modelo funciona de maravillas: si no cómo entender que, en vez de cuestionar un sistema escandalosamente corrupto y mal gestionado, los británicos y los europeos se inclinen por la derecha política…
a lo mejor les da flojera hasta pensar, vaya una a saber...
ResponderEliminarCarlos,
ResponderEliminarHay que preguntarse si el electorado se volvió derechista o sólo vota por la derecha porque la la izquierda le ofrece lo mismo que la derecha, pero "maquillado". Además, ambos sectores apuntan a la misma decadencia de hacer la vida más "cómoda" pero con distintas metodologías: la derecha por el crecimiento; la izquierda por la distribución. Ambas huelen a utopía. Lo más cuerdo sería encontrar la mezcla óptima en el continuo de políticas que apuntan a crecimiento y distribución, pero esto, de nuevo huele a utopía, porque nadie es tan desinteresado para ofrecer ese óptimo. El gran Edmundo Roja (BVdrais editores) señala con su lucidez dolorosa que todo esto se debe a que no aceptamos la muerte y queremos vivir 70, 80 años. Si aceptáramos morir a los 50 ya no sería tan urgente crecer y distribuir a gran velocidad sobreexplotando la tierra. Pero eso, de nuevo, es atroz, si uno sigue soñando con abrazar nietos. Sumos una especie completamente disfuncional en la creación...
Muy interesante lo que propones de la decadencia. Una de las cosas que más me gusta criticarle a la izquierda es justamente el valor burgués del puritanismo.
ResponderEliminarEs muy delicado hacer una crítica al fenómeno contemporáneo de "la flojera" sin caer un moralismo proto-conservador.
Esto es también parte de la paradoja democrática, un regímen que se propone expandir los derechos y el bienestar.
Ya en el campo de la praxis, me considero cuasi-atleta, practico Ju Jitsu y me fascina hacer ejercicio. Por otro lado mi mujer se parece a la del cuadro. No camina ni a la esquina, tampoco le gusta leer y sus actividades preferidas son el shopping y los programas de chimentos.
La democracia entoces sería un regímen en el que pueden convivir -más o menos armónicamente- visiones antagónicas sobre lo que es la vida.
Concretamente: Lo único que nos queda en compensar la decadencia con la virtud. Y la virtud de desta virtud debería ser aceptar la decadencia.
Saludos,
Ric.