martes, 25 de mayo de 2010
La Visibilidad de la Crisis: El hombre del Trillón de Dólares
Empatía y Escasez tienen un correlato: Entropía y Conciencia. El sistema energético es entrópico, el sistema financiero (pese a todo) también: sube y bajan las bolsas, pero hay algo peligrosamente colgante en las cuentas de capital de las grandes naciones… Todas se deben unas a otras sumas estratosféricas, y finalmente están hipotecadas hasta el fin de los tiempos. Entre 2008 y 2010 al precipicio financiero se suma la huella de carbono, el holocausto de la biodiversidad. Si la economía es energía bioquímica, y si esta se acaba, se consume, se torna inviable, ¿de dónde sacamos más?
Pero he aquí que aparece un hombre diciendo haber abierto el grifo para que surja, de la nada, un trillón de dólares.
Se llama Craig J. Venter, es un ex veterano de Vietnam y durante 15 años ha estado formando una red de investigadores para tomarse por asalto la nueva economía mundial. La mayoría son estadounidenses, pero hay también italianos, alemanes y una mexicana. Son los creadores de Synthia.
Synthia es la primera célula viva que tiene su propia página web anotada en su código genético.
Synthia es un mutante de levadura y micoides, una bacteria que provoca mastitis en la industria caprina. Se identificó el genoma del micoides. Se recombinó en un computador (como un código talmúdico de 4 letras) y con eso obtuvieron una receta bioquímica. Con 3 botellas de productos químicos se construyó un cromosoma sintético. Venter y sus boys & girls introdujeron el cromosoma en una célula de levadura a la que tuvieron que amordazar (inhibir sus defensas).
Synthia en realidad es poco importante. Es como el Sputnik. Pero el procedimiento patentado para hacerla, podría permitir grandes cosas: organismos genéticamente diseñados para absorber carbono o petróleo, actuar como nanomedicamentos, you name it.
Con razón a quienes temen que Synthia sea una abominación: se suelte en la naturaleza y lo invada todo: como en Soy Leyenda o Amanecer de los Zombies. Sin duda algo de eso habrá.
Lo que ocurre en biotecnología es ya trivial, cotidiano. Por ejemplo, mi manzana mutante: la olvidé al fondo del refrigerador durante el verano. Estaba intacta, sin rastro alguno de putrefacción. La saqué y la dejé a la intemperie otra semana, y nada. Su piel tersa como cuando cayó el árbol.
Entonces me di cuenta de que estaba frente a un producto patentado. Un fruto de manzano genéticamente modificado para rechazar invasores externos… imagine usted una película Píxar en que las hormiguitas no pueden entrar a la manzana: ¡la mastican pero es de plástico!
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La fuerza que permitió al sapiens-sapiens salir, explorar y desplazarse en busca de mejores condiciones, nos está mostrando hoy algo tan fantástico como Synthia, tan increíble como el Sputnik en su época.
ResponderEliminarEl desarrollo de la ciencia y la tecnología y el ejemplo asombroso de Synthia, nos muestra que a pesar de todos los avatares y caídas, la humanidad ha seguido avanzando en el camino del conocimiento .
Quizás haya que apostar a que podremos hacer crecer los recursos internos dentro de nosotros, para encontrar las respuestas a nuestras interrogantes. Podremos contribuir al progreso de todos si rescatamos desde nuestro interior esa otra fuerza que nos permitió integrar el mundo exterior dentro de los confines de nuestro cuerpo material y nos constituyó en propiamente humanos: La Empatía, con su correlato La Conciencia